¿Con qué frecuencia se debe cambiar la arena del filtro?
Un buen estado de conservación de los lechos filtrantes, sílice o cristal, nos aporta una correcta retención de partículas coloidales y materia orgánica en los filtros.
Por medio del tratamiento químico (desinfectantes y reguladores de pH) y el tratamiento físico (filtros y sistemas de desinfección no químicos, como el UV) garantizamos la calidad y seguridad del agua de baño.
Un buen estado de conservación de los lechos filtrantes, sílice o cristal, nos aporta una correcta retención de partículas coloidales y materia orgánica en los filtros y, por ende, su eliminación del circuito del agua en el proceso de lavado.
A mayor eficiencia del sistema de filtración, menor demanda de desinfectante químico, y a menor aportación de productos químicos, disminuimos las consecuencias negativas derivadas de su uso.
La arena de sílice, compuesta de óxido de silicio al 99%, tiene una duración variable en función de tres factores:
- Tipo de desinfectante empleado: Las piscinas tratadas con hipoclorito sódico tienen una duración mayor que aquellas tratadas con tabletas de cloro o bromo debido a la naturaleza ácida de estos últimos. Asimismo, aquellas piscinas con alta utilización requerirán mayor cantidad de desinfectante y, por tanto, influirán negativamente en la duración.
- Temperatura del agua: El consumo de desinfectante depende en gran medida de la temperatura del agua. Incrementar 1ºC la temperatura del agua, supone un 15% más de consumo en reactivos. A mayor temperatura, mayor adición de reactivos y menor duración de la arena de sílice.
- El mantenimiento: Las partículas de sílice observadas de cerca tienen una forma poliédrica, llenas de aristas e imperfecciones. Con el paso del tiempo, las sales contenidas en el agua, grasas y partículas se depositan en estas aristas, llenando con suciedad incrustada los espacios destinados a retener las partículas coloidales y mermando la capacidad de los filtros. Es muy importante emplear un regenerador de filtros periódicamente (anual en piscinas de natación, semestral en piscinas de actividades y trimestral en spas y similares), para garantizar el estado óptimo del material filtrante en todo momento.
Atendiendo a los tres puntos anteriores y bajo nuestra experiencia, recomendamos las siguientes periodicidades:
Piscinas sin climatizar:
- 10 años (tratadas con hipoclorito).
- 6 años (tratadas con tabletas o cloración salina).
Piscinas climatizadas hasta 28 ºC:
- 8 años (tratadas con hipoclorito).
- 5 años (tratadas con tabletas o cloración salina).
Piscinas de más de 28 ºC o SPA’s:
- 6 años (tratadas con hipoclorito).
- 3 años (tratadas con tabletas o cloración salina).
- 2 años en spas y similares.
Todos estos datos están basados en el uso de sílice de calidad, debidamente mantenido y regenerado con productos no ácidos.
Para más información o adaptar un calendario de mantenimiento a tu planta de depuración y tratamiento físico, no dudes en consultar con nuestro departamento técnico.
Fuente: SOLATEP